Iniciar Sesión o Registrar
Para marcar un libro como favorito primero debe iniciar sesión
Los faros del coche iluminaban la carretera desierta. Jean Meyers apretaba a fondo el acelerador. Debía llegar a Niza a medianoche. De pronto un relámpago iluminó el cielo y empezó a llover. Observó el velocímetro. La aguja marcaba tos sesenta kilómetros. No, no llegaría a Niza aquella noche. Y de pronto ocurrió. El limpiaparabrisas se detuvo sin que Jean hubiese tocado la clavija. ¿Qué le pasaba ahora a aquel chisme?
Para marcar un libro como favorito primero debe iniciar sesión