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Loshijos del dragón han regresado a su hogar para enfrentarse a la tiranía deJuraknar, saliendo victoriosos en algunos encuentros y no muy bien parados enotros. Losáridos terrenos de Crysalia les aguardan, pero su enemigo ha aprendido de ellosen este tiempo y ha descifrado sus puntos débiles. Ahora, gracias a las malasartes de Juraknar, Kun y Xin viajan separados y no se tienen el uno al otropara resguardarse. Así mismo, la relación de los hijos de la serpiente parecemás estable que nunca. A pesar de sus diferencias, Nathair y Nathrach hanllegado a luchar juntos y respetarse mutuamente. Aunasí, la línea que los une es muy débil, y Nathair deberá cuidar bien sus pasossi no quiere que su hermano descubra que el traidor que llevan tanto tiempobuscando, en realidad es él. Las victorias de los hijos del dragón se hanextendido con rapidez por cada rincón de Meira y muchos se han armado al finpara rebelarse a la tiranía que tantos años ha formado parte de su vida.Pero la guerra, soloacaba de empezar y lo vivido años atrás, no es nada comparado con la oscuridad queamenaza con envolverlos de nuevo.